El resultado final del partido (3-6) puede llevar a equivocación, teniendo en cuenta lo que se vio en el campo. Demasiado castigo para el Sporting en mi opinión. Para mí, como entrenador y espectador, lo justo hubiese sido un empate, pero por desgracia, el fútbol no siempre reparte justicia.
El partido no comenzó bien para el Sporting, concedimos 2 goles muy pronto en la primera parte, por despistes nuestros, añadido a un poco de mala fortuna. Quiero recalcar que el equipo, ha sido creado este año y todavía se están adaptando los jugadores entre ellos y al entrenador. Con todo esto, conseguimos hacer el primer tanto de la temporada y nos fuimos al descanso perdiendo sólo por un gol.
Aún con el poco tiempo que el equipo lleva junto, en la segunda parte se vio garra y táctica a partes iguales por parte del benjamín G del Sporting, sin bajar nunca los brazos. Los chicos que estaban en el campo se dejaban la piel, y los que estaban en el banquillo estaban deseosos de salir a jugar. Se vio mucho respeto por parte de ambos equipos cuando había una infracción y compañerismo. Conseguimos marcar dos goles más y aunque no fue suficiente para ganar o empatar el partido, todos se fueron con la satisfacción del trabajo bien hecho.
Las claves de este equipo son la garra, el coraje, no dar un balón por perdido, luchar hasta el último minuto, el gol de un compañero es celebrado por todo el equipo, lo que demuestra una gran unión. Somos conscientes de que tenemos mucho trabajo por delante, pero con la ilusión de todos, y el rendimiento demostrado tras tan poco tiempo juntos demuestra que pueden llegar hasta donde ellos se marquen.
¡VAMOS SPORTING!